lunes, 26 de agosto de 2013

El asesinato de Pitágoras, de Marcos Chicot


El asesinato de Pitágoras · Marcos Chicot · Autoedición · 620 páginas · 2'99€ (aquí) · Abril 2013
El anciano filósofo Pitágoras es uno de los personajes con más poder político de su época. Está a punto de nombrar un sucesor entre sus grandes maestros cuando en su comunidad se inicia una serie de asesinatos. Cada muerte tiene lugar de un modo más desconcertante e imprevisible, reflejando tras ellas una mente oscura y poderosa que parece superar a la del mismísimo Pitágoras.
La enigmática Ariadna y el investigador egipcio Akenón tratarán de identificar al asesino a la vez que resuelven sus propios sentimientos. Un reto en el que los fantasmas del pasado se unen a las oscuras amenazas del presente. Un desafío del que resulta casi imposible salir con vida.
En esta novela, en la que gran parte de los hechos y los personajes son reales, el lector se adentrará en un misterio aparentemente irresoluble. A través de sus páginas descubrirá secretos inéditos y encontrará a los personajes más inquietantes que haya conocido jamás: el sibarita Glauco, el monstruoso Bóreas, el vengativo Cilón y, sobre todo, el misterioso desconocido que está utilizando sus capacidades prodigiosas para sembrar la muerte.

Fue el autor quien se puso en contacto conmigo para que leyera El asesinato de Pitágoras. De no haber sido así, no sé si lo hubiera leído, y la verdad es que me alegro enormemente de haberlo hecho. Aunque cuando Marcos me habló de su novela yo no la conocía, me dijo que era de un género que me gustaba (novela negra) y me ganó. Y al enterarme de que había quedado finalista del premio Planeta... ya no tuve que pensarlo más, y allá que fui.

El asesinato de Pitágoras resultó ser una lectura más que interesante. Cuenta la historia de una investigación policial pero situada en la época de Pitágoras. No sé por qué yo pensaba que intercalaría una historia en un tiempo actual con esta que de verdad cuenta, pero la verdad es que no siendo así, no me ha decepcionado en absoluto y me ha resultado muy amena. De hecho me da la sensación de que he aprendido muchísimas cosas acerca de la vida de la gente de aquella época... pero sin haberme esforzado para nada, lo cual es estupendo. Todo lo que respecta a la sociedad pitagórica, a las costumbres, me ha resultado muy ameno. En cambio, hay algunas cosas matemáticas que ya no es que me hayan aburrido sino que me han hecho comerme la cabeza. La verdad es que se nota que al autor le gustan, porque habla de ellas de manera muy natural, que sí, puede que a mí no me hayan cuajado pero es por la sencilla razón de que las matemáticas y yo no nos llevamos del todo bien.

Me han gustado mucho los personajes, sobre todo Akenón. Quizás sea porque es egipcio, y a mí el Antiguo Egipto me vuelve churúa, pero la verdad es que su historia y su personalidad han hecho que no solo me preocupase de la resolución del misterio, sino también de él. También me ha gustado mucho que haya varias tramas: no solo se habla de una investigación (muy bien llevada, ya hablaré de ella más adelante), sino también de la caída de una ciudad, hay una historia de amor... todas ellas se complementan muy bien, y pasa lo que he comentado antes. Al final, no solo piensas “¿quién será el asesino?”, sino que te pones a pensar a ver si todos los personajes conseguirán sus propósitos.

Pero en fin, os voy a hablar de la parte más importante de la novela, que es la de la investigación (al fin y al cabo, es algo así como una novela policíaca, o así es como la catalogaría yo). Desde un primer momento empieza a engancharte, como una buena novela negra, y la verdad es que aunque barajaba varias posibilidades, y pasé por la correcta, al final el desenlace me sorprendió muchísimo. Yo soy de esas que se dan poca cuenta de quién es el asesino, porque oye, tampoco es mi objetivo saber cosas antes de lo necesario, pero tengo que elogiar a dos personas en este caso. El primero es, por supuesto, Marcos Chicot, porque consiguió atraparme sin tan siquiera plantearme que podría averiguar yo solita quién había matado a esa gente. El segundo es el asesino, sea quien sea. Porque es uno de esos fríos e inteligentes que desde la primera página te deja ojiplático... y creedme que sigue sorprendiendo según se van sucediendo los acontecimientos.

Ya terminando, comentar que no me extraña que el libro haya tenido el éxito que ha tenido, porque el autor consigue crear la mezcla perfecta entre diálogo y trama, de manera que ni se hace aburrido ni excesivamente ágil, lo que quizás sería un poco peliagudo por el tipo de novela que es. Puede que El asesinato de Pitágoras no sea un best-seller de estos que se recomiendan en todas las librerías (y su formato lo hace más difícil), pero es una apuesta segura y creedme, os aseguro que si ha triunfado en Internet, es por algo. Yo me lo he pasado muy bien durante su lectura y lo recomiendo con creces: a lectores de este tipo de novelas y a los que les guste aprender algo según leen.

El asesinato de Pitágoras me ha resultado una lectura muy amena; si bien empieza poco ágil, la cosa se pone interesante y no decae. Marcos Chicot ha conseguido crear un libro que desde luego es muy recomendable, con unos personajes realistas y unas tramas que se juntan a la perfección para dar un resultado fantástico.

4 comentarios:

  1. No conocía este libro y al principio no me llamaba mucho pero a medida que iba leyendo la reseña me ha abierto curiosidad por saber lo que pasa dentro de sus paginas.

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  2. Yo tengo pendiente leerlo y con esta buena crítica, me dan muchas ganas de hacerlo yaaaaa. A ver si puedo hacerle un hueco prontito, más bien, a ver si puedo ponerme a leer. Qué desastre. Saludotes.

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  3. Hombre le deseo mucha suerte al autor :) se ve bueno!

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  4. La tengo pendiente desde hace algún tiempo, a ver cuando puedo hacerle un huequillo.
    Besos.

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