Título: Retrato de un crimen
Autora:
Heather Graham
Saga:
Libro independiente
Editorial:
Harlequín
Fecha de publicación: Marzo 2003
Cuando todavía no había terminado su formación como policía, Ashley Montague presenció un terrible accidente cuyas horribles imágenes no podía quitarse de la cabeza, así que decidió investigar el caso por su cuenta. No tardó en descubrir que había sido un intento de asesinato. En otro lugar, el detective Jack Dilessio era el encargado de investigar otro asesinato que resultó estar relacionado con el de Ashley. Por eso la joven agente decidió pedirle ayuda al veterano detective.Juntos se vieron arrastrados hacia el peligroso mundo del tráfico de drogas y los extraños cultos religiosos.
·Resumen·
Ashley
es estudiante de policía. Jack es detective. Aunque en un principio no estaban
destinados a encontrarse, sus caminos se
cruzan por un accidente de tráfico poco usual que desemboca en una trama de
fanatismo bastante… peliaguda. Así, comenzará una historia que puede terminar en risa o en llanto, en amor o en odio.
·Mi opinión·
Si
os digo la verdad, no sabía que esperar de esta novela. Me la dejó una amiga,
diciéndome que estaba genial, pero ya está. Y dado que no suelo fiarme de todo el mundo, imaginaba que vale, que sí,
que bien y adiós. Cuán equivocada estaba, queridos míos. Y es que puedo
deciros que me encuentro en la tesitura
de reseñar un libro increíblemente genial, y eso no se ve todos los días
(*Sasy baila*). Comenzaré hablando de los personajes, que tengo bastante que
decir. Ashley es nuestra protagonista, y es especial. Es un encanto, la clase de persona coherente y realista que podríamos
encontrarnos por la calle, y en cuanto al detective Dilessio… ai, también me ha
encantado. Es una persona que sufre como
un condenado por un hecho de su pasado, y gracias a Graham por haber sabido tan
bien cómo transmitirnos esa forma de ser, arisca pero encantadora a fin de
cuentas. Su relación está perfectamente desarrollada; y los personajes secundarios están total y
absolutamente justificados, todos y cada uno de ellos (me he quedado con
ganas de saber más de las amigüitas de Ash, jo).
Está maquinando. |
Pasemos
a la escritura de la señora Graham. Me
quitaría el sombrero, si lo tuviera, ante la capacidad de esta buena mujer. Creo
que hacía mucho tiempo que no lo pasaba tan mal leyendo un libro; ¡y no os podéis
imaginar la de veces que me engañó! Sobre todo hubo una vez en la que pensé
“já, te he calado, no era para tanto”
y SÍ era para tanto y por si os lo
preguntabais NO, no le había calado. Debo reconocer que había veces frases
o palabras no encajaban, pero era una de
esas veces en las que se nota que es la traducción la que es un poco torpe,
y al final te acabas acostumbrando. Pero si tenéis la oportunidad de leer algún
libro suyo, hacedlo, que os va a encantar su forma de engañaros (yo ya voy a la caza de otros :*). El
ritmo, como podréis imaginar, es
trepidante, y es que no dejan de pasar cosas. Desde que en las primeras páginas
nos presentan una situación comprometida y muy misteriosa (y un posterior
vertido de café sobre Jack, que pobrecico él), no va a parar de haber cosas que
te obliguen a no dejar de leer. Maravilloso,
en serio.
En
cuanto a la trama, es una novela policíaca
con toques de amor (bastantes toques de amor), deseo, atracción y demás. La
trama policíaca la salva perfectamente, de hecho es una maravilla: en ningún momento te pierdes, al menos no más
de lo que la autora quiere que lo hagas. Y bueno, en cuanto a la tensión
sexual entre los protagonistas, haberla hayla, y nos va a dar situaciones de lo más graciosas,
comentarios que nos hacen suspirar y resoplar de risa (en serio, mi madre
se quedó flipando xD) y también escenas más subiditas de tono, un par de ellas
tan solo, que en mi humilde opinión están
muy bien escritas. Y ahora viene la pega. LA pega, que ha hecho que este
libro no sea PERFECTO, porque
mirad que podría haber sido PERFECTO,
pero no. Es ese final, demasiado
edulcorado para mi gusto, demasiado poco con la tónica del libro… parece que la
autora quiera que los lectores se queden contentos y para ello le da un final
excesivamente feliz que no pega demasiado. Y yo, llorando. Pero aun así, me
ha gustado tanto, tanto, que se lleva notaza.
Retrato
de un crimen
pasa desde ya a ser una de esas novelas que siempre se recomiendan. Con sus
personajes carismáticos y su trama es adictiva y trepidante, pero desde luego
lo que la hace especial es la manera de Graham de jugar con el lector,
consiguiendo que te introduzcas en la novela de manera exagerada y haciéndola
muy difícil de olvidar.
La verdad es que no sabría situarme, me encantan las novelas policíacas, pero eso de que tenga bastante romanticismo me tira un poco para atrás. Tendré que probar suerte :)
ResponderEliminar¡Saludos!
AL FINAL ME HAS ACABADO CONVENCIENDO, MALDITA SERVIDORA DE SATANÁS.
ResponderEliminarLa verdad es que no me llama mucho.
ResponderEliminarUn besito.
WoW, no lo conocía, pero lo has puesto por la nubes, a mí es que este tipo de novela no me va mucho, pero estaré pendiente por si me cruzo con ella.
ResponderEliminarMe alegra que lo hayas disfrutado tanto. Muak
La portada me decia que era una novela romanticona adulta xDDD pero veo que no se ve muy bien!
ResponderEliminarEspero que con final edulcorado no te refieras a que la agente y el detective se lían y pasan de "sólo sexo" a "hacer el amor delicadamente como pétalos de rosa arrastrados por una corriente de aire caliente". Este es mi género y odio cuando lo estropean con eso :l
ResponderEliminar@Edelia: no es que se líen (que también, pero vamos, eso estaba mascado desde el minuto cero xD) sino que es un final demasiado feliz, como en esas novelas de chick lit en las que todos acaban felices cual perdices :/
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