La hija de la serpiente, de Evelyne Okonnek

Título: La hija de la serpiente
Autora: Evelyne Okonnek
Saga: Libro independiente
Editorial: San Pablo
Fecha de publicación: Abril 2009

En Lehanâr llega el día de la ceremonia de iniciación de Lîahnee como Guardiana de la Serpiente Blanca. La joven tiene apenas quince años pero al morir su madre, ha heredado el cargo, que sólo pasa a las mujeres. Lîahnee no se siente preparada para ello, es inexperta y nunca se le ha dado bien la magia. Además, ahora tendrá que enfrentarse con grandes amenazas: su reino está siendo devastado por dragones, lobos sedientos de sangre siembran el pánico y las personas desaparecen sin dejar rastro. Desesperada, Lîahnee pide ayuda a su hermano Minohem, quien se comprometió a ayudarla para que nadie notara sus carencias. Pero él se pasa casi todo el tiempo en la siniestra torre, estudiando los antiguos códices mágicos: ha caído en las redes de la magia negra, convirtiéndose en un ser ambicioso, sin escrúpulos, dispuesto a cambiar las costumbres de su tierra y a servirse de la ingenuidad de su hermana para lograr sus propios fines. Incluso es capaz de lanzarla, a través de un portal mágico, a un mundo extraño, falto de luz, del que no parece que la joven pueda escapar.

·Resumen·

Hay una tradición que dice que todas las mujeres de la familia de Lîahnee serán las Guardianas de la Serpiente Blanca, como una especie de sacerdotisas. Y ahora es su turno. Sin embargo, a ella no se le da nada bien la magia, de hecho lleva toda la vida fingiendo que es ella la que hace los hechizos cuando en realidad... es su hermano. ¡Sí, su hermano! Pero ese no es el problema: el problema es que el susodicho es malvado, malo malísimo, y quiere usurpar su lugar como Guardiana. Un giro brutal de los acontecimientos hará que Lîahnee se vea en una tierra desconocida, distinta, oscura. Y hasta aquí puedo leer.

·Mi opinión·

No leáis la sinopsis. Creo que ya he dicho demasiado yo, así que imaginad esa parrafada que prácticamente desvela medio libro. En fin, dicho esto, os cuento. Podemos dividir La hija de la serpiente en dos partes: la primera es un tanto floja, y con un argumento que a pesar de pintar muy interesante, se lee como por encima, como si la autora no quisiera desarrollarlo del todo. Supongo que esa sería la idea de la autora: hacer que ese mundo estuviera deshilado para hacer que la realidad fuera la de la segunda parte, pero no sé. No terminó de convencerme. Estuve por dejar de leer el libro. En otro orden de cosas, la protagonista (Lîahnee) en estos primeros capítulos se nos presenta como alguien débil, bajo la permanente sombra de su hermano, con lo cual es difícil identificarse con ella. También se nos presenta una historia de amor muy light, muy tonta. Todo esto está contado de una forma muy descriptiva, que no densa, que en general me ha gustado mucho, y consiguió que continuara leyendo.

Ahora os hablaré del resto del libro. Pese a ese inicio tan... bueno, así de esa manera, a partir de la mitad (cuando pasa lo del portal, para entendernos), cambia radicalmente. La protagonista pasa a ser segura de sí misma, inteligente, y todos los personajes secundarios tienen su propia y definida personalidad. Así, lo que comenzó siendo aburrido y flojo se convierte en una lectura ágil y ligera que desde luego no deja indiferente. Hay acción en prácticamente todas las páginas, y muchas luchas, y un misterio bastante bien forjado que nos mantendrá si no en vilo, sí entretenidos durante el resto del libro. Que sí, está claro que el misterio no es tal para los lectores puesto que ya conocen todo el pasado de la protagonista, pero sí es verdad que ayuda a llevar toda la trama de la novela hacia un lugar donde se dará el desenlace. ¿Que qué lugar es ese? Aaah, eso tendréis que adivinarlo vosotros leyendo el libro :P

Me resta hablar del final, sobre el cual tengo sentimientos encontrados. Es muy realista, de la filosofía de "la vida es una mierda, y nada acaba bien nunca", y eso a esta novela, que recuerda a las novelas de fantasía que yo leía de pequeña, no le pega nada. Ya sabéis que a mí los finales no-felices (ya no diré tristes) me gustan, pero me ha parecido hasta ofensivo terminar así. Metió una historia de amor un poco con calzador que a pesar de todo se volvió bonita y acomodada a la historia y... ¡puf! De pronto, se cargó toda la atmósfera mágica que había logrado con un par de golpes a los lectores. Aclaro que no es que no me haya gustado, sino que le pega tan poco a la novela que me decepcionó mucho. De todas formas, la autora lo esboza de tal forma que el final queda muy cerrado y no da pie a una posible segunda parte (¡gracias a dios!), y además se solucionan todos los misterios de una forma muy rápida e inteligente. 

 

En definitiva, La hija de la serpiente, si la lees sin demasiadas expectativas, te gustará. Tiene un comienzo algo flojo en todos sus aspectos, pero, todo hay que decirlo, mejora a partir de la mitad, y mejora mucho. La prosa de la escritora es muy buena y hace que nos metamos en la historia de una manera rápida y, si no fuera por ese final que tan poco encaja con la novela en conjunto, se hubiera llevado más nota. ¿Lo recomiendo? Sí, la verdad: para pasar un buen rato.

Agradecimientos a San Pablo por el envío.